Muchos estábamos esperando el Día de Muertos para comer pan de muerto. Y es que esta es una de las tradiciones más esperadas en México, la cual se remonta a la época prehispánica, cuando ya se preparaba un pan de amaranto y maíz seco y tostado llamado ‘’mariposa’’ o ‘’papalotlaxcalli’’ que se presentaba a los dioses como una ofrenda.
Existe una variante de esta historia que dice que el pan de muerto remonta sus orígenes en la fusión entre dos mundos: el prehispánico y el español. Inspirado en prácticas rituales, actualmente el pan de muerto guarda un mundo de simbología en cada figura.
El festejo del 1 y 2 de noviembre busca reunir las almas de los muertos con los vivos. En esta celebración, la muerte no representa una ausencia sino una presencia viva; la muerte es un símbolo de la vida que se materializa en el altar ofrecido. De esta forma las familias se reúnen para honrar sus tradiciones.
Y para celebrar la llegada de nuestros parientes, Grupo Restaurantero Gigante (GRG) y la cadena de restaurantes Toks han lanzado al mercado una serie de panes de muerto, bajo el nombre de Pan de Muertoks, con variantes dulces y saladas que te harán pedir más.
Los dulces
Individual en cuatro sabores: azúcar, ajonjolí, mocachino, relleno de zarzamora y queso crema.
Grande en dos sabores: azúcar y mocachino.
Los salados
La Mexicana: Pan de ajonjolí, con chilaquiles con salsa verde al cilantro, pechuga de pollo crocante, acompañada de frijoles.
La Oaxaqueña: Pan de ajonjolí, con chilaquiles de mole negro artesanal, pechuga de pollo a la parrilla y frijoles.
Ofrenda: Hamburguesa de pan de ajonjolí con carne de res Angus al gratín con aderezo de jalapeño.
No te pierdas esta propuesta gastronómica que estará vigente hasta el 6 de noviembre.