Según las últimas estimaciones publicadas por reconocidos medios y analistas, se menciona que la crisis del coronavirus podría tener un gran impacto en el PIB mundial, cifras que no se veían desde la Segunda Guerra Mundial.
Sin embargo, los organismos internacionales como la Organización Mundial del Turismo (OMT) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) han unido esfuerzos y se encuentran trabajando para enfrentar los retos que dejará esta pandemia.
El sector de hospitalidad requerirá de mayor protección, cuidado y proyección para iniciar su recuperación cuando se controle la crisis sanitaria. Para entonces, las dinámicas de consumo habrán cambiado, habrá más desconfianza e incertidumbre, temas que algunas empresas ya venían trabajando y que ayudaban al país entre los primeros lugares más visitados del mundo, aseguró Pablo Lomelí, director de Negocios y Hospitalidad en SGS México, compañía líder a nivel mundial en servicios de inspección, verificación, análisis y certificación.
Lomelí mencionó que estamos ante una crisis sanitaria que previsiblemente evolucionará a una crisis económica global, por lo que podemos decir que esta es una crisis volátil, incierta, compleja y ambigua .
En 2019, México recibió 44,7 millones de turistas extranjeros, que dejaron un gasto de 24.816 millones de dólares, cifras que supusieron respectivamente incrementos del 8,3% y 10,2% sobre 2018, según datos Secretaría de Turismo, lo que posicionaban a nuestro país en el lugar número 7 de los países con más ingreso de turistas en el mundo.
En años recientes, el aumento de los flujos financieros y de personas hacia este sector habían estado por encima de muchas otras economías avanzadas y emergentes. Sin embargo, los planes de continuidad de negocio que muchas empresas tienen no necesariamente están aptos para gestionar hechos tan dinámicos y cambiantes como el COVID-19 entre otras contingencias.
El turismo después de COVID-19
En la industria de la hospitalidad, la atención al detalle y la calidad del servicio son clave para que las empresas se mantengan competitivas, pero sobre todo para brindar seguridad. Si bien existen varios estándares obligatorios, las leyes de cada país son variables.
Existen tres escenarios claves una vez que la humanidad pueda empezar a salir de sus casas, menciona Pablo Lomelí “hay que tener en cuenta que la gente tiene necesidad de viajar y muchos hemos estado y seguimos estando muchos días confinados y hay ganas de salir de casa por lo que los primeros viajes principalmente serán a destinos locales y cercanos”.
Con esta primera etapa vendrá una exigencia mayor hacia la limpieza, seguridad e higiene, seguramente existirán tarifas flexibles para tratar de reactivar el mercado.
Lo siguiente, será ver una cierta recuperación del turismo vacacional, esta demanda de turismo irá acompañada por un aumento de la confianza que hará que empiecen a activarse reservas a destinos internacionales. Las autoridades deberán tomar lo mejor de esta crisis para establecer protocolos más estrictos
Por último, queda hacer un análisis a conciencia sobre los hechos y acciones, así como la sensibilización con aspectos relacionados con la seguridad y la sostenibilidad.
Sin duda alguna, toda empresa que se dedique a la hospitalidad (restaurantes, hoteles, bares, etc.) y tenga como principios mantener su relevancia dentro del mercado, atraer nuevos clientes y expandir su negocio requiere cumplir con estándares nacionales e internacionales, es decir, certificaciones, que ayudan a formar una cultura de trabajo fija a la excelencia como el objetivo a cumplir en cada acción que se realice.
Las certificaciones promueven que todos los requisitos legales estén cubiertos, y exige que otros con un grado de complejidad mucho mayor se mantengan en constante actualización.
Lomelí afirmó que el sector de la hospitalidad, como uno de los principales motores generadores de empleo e ingresos económicos a escala mundial, ha venido sometiéndose a la competencia de su mercado, basándose principalmente en la guerra de precios, así que es imprescindible mantener la relación de precio y calidad si se quiere sobrevivir en el futuro de este sector.
SGS apoya al sector turístico a nivel mundial trabajando con los mayores operadores turísticos, realizando más de 3,000 auditorías anuales a establecimientos. El objetivo de estos trabajos es asegurar el cumplimiento en materia de seguridad y salud conforme a los requerimientos locales y a los estándares de la Organización Mundial del Comercio Justo (WFTO) o en sus siglas en inglés FTO, coordinando la gestión de incidencias y respuesta ante posible emergencia.
Es difícil de ignorar que actualmente nos encontramos en un escenario global, social y tecnológico, del cual la hospitalidad tiene que salir a flote, lo que marcan nuevos conceptos de turismo enfocados a la responsabilidad, la sostenibilidad, la flexibilidad y la seguridad. Este nuevo escenario hace referencia a las nuevas exigencias de los consumidores y a la consecuente diversificación de la industria turística, cada día más segmentada y enfocada a nichos de mercado cada día más individualizados.
La competencia en este nuevo escenario está basada en cómo superar las expectativas de los clientes y como brindar seguridad, es por estas razones que es importante enfocar los esfuerzos para cumplir con los altos estándares de calidad que a nivel mundial son requeridos y que dan seguridad a los turistas.